La Sonrisa de los peces de piedra, de Rosa Huertas, nos transporta a dos momentos fundamentales de la historia de España: los años 30, con la efervescencia cultural de la Generación del 27, y los años de la Transición, marcados por la lucha por recuperar la memoria histórica.
En los años 30, la Residencia de Estudiantes se convierte en el epicentro de la trama. Un lugar que albergó a grandes figuras como Federico García Lorca y Salvador Dalí . Este espacio representa la creatividad y los sueños de una generación que quedó interrumpida por el estallido de la Guerra Civil. La novela revive esa época de ideales y arte, pero también muestra cómo esos sueños se vieron barridos por el conflicto.
Por otro lado, la historia avanza hasta la Transición española, un momento en el que las heridas del franquismo siguen presentes. En este contexto, los personajes actuales lidian con secretos familiares y luchan por conectar con su pasado. Es una etapa marcada por el deseo de reconciliarse con la historia y de construir una nueva identidad colectiva.
A mi parecer, esta novela es perfecta para transportarte a la época de la movida madrileña. Hace referencia a muchos sitios de Madrid que, a posteriori, se han visto modificados o se han mantenido exactamente igual que hace 40 años. Pasearte por las calles conociendo su historia es más entretenido y hace la vida más interesante.
Una anécdota de este libro es que, después de leerlo con mis compañeros de clase, nos dedicamos a buscar las zonas mencionadas de la ciudad. También les preguntaba a mis padres sobre los datos que aparecían y cómo vivieron esa época.
pd: El nombre del libro hace referencia a la fuente localizada en Tribunal, Madrid.
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